ChatGPT no tiene nada que ver con Siri o Alexa. 

Hablamos de un modelo real de inteligencia artificial imaginado por la ciencia ficción del siglo pasado. Un «software» que escucha, responde, encuentra soluciones, adaptándose poco a poco a las diferentes situaciones, con una constante capacidad de autoaprendizaje y un universo infinito de conocimientos (bases de datos) de donde extraer información. En definitiva, una “máquina” que simula, en todos los aspectos, el pensamiento del cerebro humano. ChatGPT es inteligencia artificial generativa.

ChatGPT es inteligencia artificial generativa

¿Qué es el conocimiento sino una acumulación de memoria (conocimiento más experiencia) que se une a la capacidad de procesamiento lógico-racional de la mente, transformándose en pensamiento? ChatGPT «simula» esta habilidad. Y lo hace de forma sorprendente. Desarrollado por OpenAI, ChatGPT utiliza tecnología de lenguaje natural para interactuar con los usuarios a través de chat o mensajes de texto. El acceso es muy fácil: basta con un simple navegador. A cada pregunta, ChatGPT demuestra que puede responder con pleno conocimiento de causa, desde las cuestiones más sencillas a las más complejas, destacando una sorprendente precisión estilística y una fluidez discursiva igualmente singular. Pero no solo. Al repetir la misma pregunta, la respuesta cambia, mejora.

Aplicaciones prácticas

Ejemplos de cómo se podría utilizar ChatGPT en diversos contextos, como la escuela, la asistencia virtual y el análisis de grandes cantidades de datos.

Hay muchas cualidades que llevan a ChatGPT a revelarse como una herramienta útil con muchas aplicaciones prácticas, por ejemplo, en la escuela. En este contexto, de hecho, podría usarse para ayudar a los estudiantes con problemas de aprendizaje o necesidades educativas especiales en el estudio y la comprensión de temas complejos., ofreciendo explicaciones detalladas sobre temas específicos. Además, al ser capaz de producir ensayos breves originales, de notable precisión y sin errores gramaticales, podría ayudar a personas con problemas lingüísticos, dislexia o disgrafía. 

Otras aplicaciones prácticas

Como asistente virtual, es evidente su aplicación para automatizar muchas tareas diarias, como programar citas o buscar información en línea. Pero ya hay quienes dicen que será muy utilizado en el campo médico y legal, incluso allí reemplazando una parte del trabajo humano. 

En el campo médico, ChatGPT podría usarse como asistente virtualpara ayudar en el diagnóstico y tratamiento de enfermedades. Por ejemplo, podría usarse para analizar grandes cantidades de datos médicos y científicos para identificar posibles correlaciones entre los síntomas y la enfermedad de los pacientes, o para ayudar a los médicos a desarrollar planes de atención personalizados para sus pacientes. 

En el campo legal, ChatGPT podría usarse como un asistente virtual para ayudar a los abogadosen la búsqueda de precedentes judiciales y en la preparación de documentos legales. También podría usarse para analizar grandes cantidades de datos legales, como decisiones judiciales y leyes, para identificar posibles fortalezas o debilidades en un caso. 

En todos los casos, es importante subrayar que ChatGPT no podría reemplazar por completo el trabajo humano, pero podría usarse como una herramienta para automatizar algunos procedimientos más repetitivos y laboriosos, permitiendo que los profesionales se dediquen a actividades de mayor valor agregado.

Impacto revolucionario

Reflexión final sobre el impacto que una inteligencia artificial como ChatGPT podría tener en la sociedad y su evolución, comparable al que tuvo la Web en los años 90.

Por lo tanto, una inteligencia artificial como ChatGPT parece tener todo el potencial para un impacto revolucionario en la próxima década, al tener la capacidad de analizar y utilizar grandes cantidades de datos. Si recordamos cómo era la Web en los 90 y cómo nos cambió la vida entonces, multipliquemos todo por cien o por mil y, quizás, entendamos lo que está a punto de pasar con ChatGPT y “bots” similares. Por supuesto, la adopción de estas tecnologías también conlleva algunos desafíos, incluida la necesidad de garantizar la seguridad de los datos y la protección de la privacidad. Además, es importante garantizar que las soluciones basadas en IA se utilicen de manera responsable y no perpetúen los prejuicios y la discriminación ya presentes en la sociedad. A pesar de estos desafíos, el futuro de la IA aún está por escribirse, pero una cosa es segura: el potencial es realmente enorme.

Fuente:

Francesco Pungitore

Periodista profesional, profesor de Filosofía, Historia, Ciencias Humanísticas y Técnicas de la Comunicación,con posgrado de especialización en Tecnologías de la Enseñanza y Maestría en Comunicación Digital

Essere & Pensiero